Parecía que el tiempo no había pasado, él, sentado en ese pórtico estuvo observando al cielo, parecía que todo se había detenido. Quedando solo él, su vista perdida y un par de hojas a su alrededor.
Se quedo pensando perdido en tiempo y espacio, sin moverse de ese lugar, conociendo lo mas profundo de su ser, descubriendo como el viento golpeaba su cara y desplazaba sus cabellos. Dando se cuenta de lo que llevaba dentro sus recuerdos mas oscuro y sus recuerdo mas preciados. Pero de repente volvió en si, pensando cuanto había pasado desde que estaba allí, observo el reloj que se encontraba por debajo suyo, y no lo creía, parecía que el tiempo no había pasado pero sin embargo los minutos habían girado, el mundo se había detenido, ante sus ojos pero las agujas giraron sin control.
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